Mesa Estatal FCSM
La actual crisis económica, que es más bien una revolución
neoliberal, ha arrasado con innumerables derechos sociales y conquistas que la
clase obrera había alcanzado en el último siglo. Sin embargo, la perdida más
trascendental para el trabajador está pasando desapercibida aun cuando sus
efectos son devastadores.
En el modelo de sociedad al que nos arrastran las políticas
neoliberales, el individuo encuentra y justifica su propia existencia en tanto
en cuanto sirve al sistema productivo. Aquellos individuos que bien por razón
de edad, enfermedad, superación tecnológica, etc, dejan de ser “productivos”
dejan de serles útiles al sistema por lo que pasan a engrosar la lista de
rémoras, convirtiéndose en lastre improductivo que merma los beneficios.
En este contexto, el Ser Humano se convierte en un engranaje
más del sistema productivo, dejando en un segundo plano su condición de Ser
Humano. Este cambio de paradigma en la concepción del Hombre, lo despoja de
todo derecho en base a su propia condición de Ser para equipararlo con un
elemento más del sistema. Este nuevo elemento comparte con el resto de
elementos no vivos las propiedades de ser reemplazado o reubicado cuando es
necesario.
Si dejamos que esta nueve visión del ser humano se imponga
en nuestras sociedades, la aniquilación de las clases trabajadoras ocurrirán en
paralelo a desarrollo tecnológico que permitirá, en último término, la
producción sin la intervención del hombre. Este proceso, además, se encontrará
exento de peaje moral ya que los individuos no necesarios para la producción
generarán solo gasto, lo cual es injustificable en la fría lógica del
neoliberalismo.
En estos momentos son innumerables los ejemplos que nos
indican que el camino esta trazado y que la dirección es la anteriormente
indicada. Cada vez con más frecuencia las empresas que llevan a cabo un ERE o
un despido colectivo se refieren a las
personas despedidas como “posiciones” reubicadas, amortizadas o eliminadas.
Todas las políticas de privatización del llamado “modelo social europeo” nos
introducen más en este tipo de sociedad donde los servicios de sanidad,
educación y justicia pueden ser disfrutados, cada vez más, por aquellos sujetos
que pueden pagárselos. Pero también se están viendo afectados los activos de la
mera supervivencia: techo, luz, agua, calefacción, alimentación, etc, que
empiezan a encontrarse comprometidos
para amplias capas sociales. Finalmente Ser Humano será quien pueda pagárselo.
Por todo lo comentado, nos encontramos en un momento
dramáticamente importante donde todos somos necesarios para imponer en la
balanza del poder nuestros intereses, los intereses de la mayoría de la
humanidad, frente a una minoría que nos lleva a la barbarie más absoluta. Este
camino de resistencia y lucha pasa por las Marcha por la dignidad que inundarán
Madrid el 22 de Marzo. Éste debe ser el primer peldaño que nos haga entrar en
juego para reivindicar lo evidente, todos tenemos derecho a vivir
dignamente.
Apoya las Marchas por la Dignidad 22M!
Tú también cuentas!
No hay comentarios:
Publicar un comentario